Madeline Mendieta, Nicaragua, 1972.
Licenciada en Literatura. Poeta y promotora cultural. Inocente Lengua (Editorial Amerrisque, 2007) es su primer poemario bilingüe, español-inglés.
Coordinó el programa Cultural de la Biblioteca del Banco Central de Nicaragua del 2005 a 2010. Es miembro del Centro Nicaragüense de Escritores, de la Asociación de Escritoras de Nicaragua. (ANIDE) y del Comité organizador del Festival Internacional de Poesía de Granada, Nicaragua desde el 2007.
Hace parte de la antología hispanoamericana Mujer Rota en homenaje a Simone de Beauvoir.
Representó a Nicaragua en la XV edición del Festival Internacional de Poesía en Cuba en el 2010. Ha sido publicada en suplementos y revistas literarias de su país.
Del Modernismo a la actualidad.
Promoción y proyección de la literatura nicaragüense.
En el aniversario del natalicio y muerte del poeta Rubén Darío, (2016-2017) las reflexiones sobre la actual literatura nicaragüense nos reiteran una paradójica realidad, un país donde la tradición impera más que la preparación de quienes ejercen el oficio con pasión, pero con limitados recursos para publicaciones revistas, lectores.
La imagen de Rubén Darío fue un suceso relevante para América Latina, su presencia poética, la innovación de la crónica cultural fueron precedentes para que el modernismo reivindicara la labor que los escritores latinoamericanos.
No obstante, las circunstancias sociales, económicas y culturales han cambiado mucho en el panorama de América Latina, en particular de Centroamérica. Después de la muerte de Rubén Darío, se empiezan a gestar los movimientos literarios de vanguardia, protagonizados por Pablo Antonio Cuadra, José Coronel Urtecho, Manolo Cuadra y Joaquín Pasos quienes dieron un énfasis a la deconstrucción del lenguaje y de los juegos rítmicos influenciados por la generación Beat de Norteamérica.
En los años sesenta Ernesto Cardenal funda en el archipiélago de Solentiname, con los isleños de la zona, una comunidad contemplativa que además de creación artística y religiosa, se formaban de manera ideológica con lo que posteriormente sería la revolución sandinista.
En la década de los 90 los artistas y principalmente los escritores se agremiaron en dos grupos: Centro Nicaragüense de Escritores cuyo presidente honorario es el poeta Ernesto Cardenal, y Asociación de Escritoras de Nicaragua (ANIDE) cuya presidenta honoraria es la poeta Claribel Alegría.
Esta efervescencia fue oportuna para la creación del Festival Internacional de Poesía de Granada, el cual aglutina a escritores de 5 continentes y a la fecha tiene 16 ediciones. Esta no solo ha sido una valiosa oportuna proyección de poetas de Nicaragua, sino de toda la región Centroamericana.
A partir del 2000, el escritor Ulises Juárez Polanco emprende una iniciativa titulada la Generación 2000. Dicho proyecto utilizó como recurso la plataforma digital para realizar una muestra de la poesía y narrativa de lo más representativo del relevo generacional.
Centroamérica Cuenta, nació hace 5 años, la iniciativa que promueve el escritor Sergio Ramírez Mercado. Durante este encuentro, se dan cita los narradores más representativos de la región y ha sido también un esfuerzo loable para destacar a los escritores de Centroamérica y sus obras sean conocidas y reconocidas al otorgar el premio de cuento Carátula.
No cabe duda que la creación y formación literaria son parte del enorme engranaje que es la Promoción Cultural en países como los de Centroamérica donde las políticas culturales no permiten que la creación tenga la proyección y divulgación necesaria. Los escritores se han propuesto la enorme tarea que es la gestión cultural, motivando cada vez más a que las instituciones privadas no solo aporten sino también se estudie con detenimiento que la industria editorial y cultural puede generar empleo, disminución de violencia y delincuencia, así mismo las generaciones ocupan espacios no solo creativos, sino de sinergia para la economía y la transformación de una región que durante décadas solo se le ha conocido su rostro más oscuro.